Cuál Califa del Medio Oriente Chávez dispone más allá de lo que las leyes establecen. Él es el Estado, él es el pueblo, él es la voluntad soberana, él es la reencarnación del Libertador, de Marx, del Che Guevara y el hijo predilecto de Fidel.
El estado de derecho no existe en Venezuela y no puede existir en la medida en que para nuestro Primer mandatario, el espíritu de las leyes de Montesquieu, es una creación burguesa. La separación de poderes otro invento del capitalismo para perpetuar a las clases dominantes en el poder. Por eso, cual Harum Al Rashid, puede disponer a su antojo de las vidas de sus súbditos por cualquier antojo que de pronto se le ocurra y, lamentablemente en Venezuela, no parece existir una Sherezade que lo calme echándole cada noche un cuento distinto.
Las últimas y caprichosas expropiaciones dan muestra de su talante autocrático e improvisado a la vez. ¿ Cómo es eso de preguntar y ese edificio qué es?, sin saber de antemano que nuevo uso se le dará? Ahora lo peor que le puede suceder a un venezolano cualquiera es que el Presidente pase por delante de su casa o edificio y se le ocurra que sería chevere expropiarlo.
Aquí nadie está a salvo de los caprichos, de los despropósitos e incoherencias de Chávez. Este país está sumido en un estado de estupefacción tal que hace que nos parezcamos, cada día más, a lo narrado con exquisita inteligencia por Vargas Llosa en La fiesta del chivo. Lo único es que a nuestro personaje de marras sólo le interesan, por ahora, las fábricas, los edificios, los hoteles, los centros comerciales y, quién sabe si, quizás, las casas también.
Fuente: Analítica. com
No hay comentarios:
Publicar un comentario