4/5/10

Manos cubanas metidas también en el manejo irregular del negocio del arroz en Venezuela.

Una de las razones por las cuales los cubanos no quieren salir de Venezuela, se aleja de la ideología socialista, pues en realidad lo que más les atrae es el acceso directo que tienen a fuentes de corrupción.

Uno de los asuntos a revisar, es cómo los funcionarios cubanos que tienen una asignación en Venezuela de apenas 1300 Bs al mes, cada mes llenan su casa de electrodomésticos cada mes para enviarlos a Cuba.

Elías Jaua, que preside La Corporación Venezolana Agraria ¿está o no al tanto de las irregularidades que cubanos, en combinación con venezolanos cometen ahí?

Una información difundida el día 18 de enero de este año a través de correos de diferentes funcionarios del Ministerio de Agricultura y Tierras, con énfasis a los de CVA (Corporación Venezolana Agraria), decía lo siguiente:

“Actualmente se informa de un robo de 7 gandolas de arroz en cáscara, sustraído de la planta de esta empresa ubicada en la localidad de Payara estado Portuguesa, donde se le “echó tierra” a la denuncia debido a que todo apuntaba como responsable a un funcionario cubano de apellido Anillo, quien desempeña funciones de coordinador de transporte y maquinaria en dicha empresa. La denuncia fue hecha ante el CICPC, pero sin posterior seguimiento”.

A ésto se le suma la pérdida de una cantidad considerable de arroz terminado en Puerto Cabello que iba con destino a Cuba; mediante condiciones de negociación muy particulares donde se puede mencionar:

-Precio del arroz hasta 40% por debajo de los precios internacionales.

-5 años para pagar.

-Gastos de transporte y aduana por cuenta de Venezuela.

-Gastos derivados de la inspección de la calidad del arroz desde la planta hasta destino final que realice la empresa cubana ALIMPORT, corren por cuenta del vendedor, sin señalar que los mismos gastos en la mayoría de los casos está por encima del valor total del arroz “saqueado” a Venezuela.

-No se verifica la condición de “Demanda Satisfecha” que impone el Estado para autorizar exportaciones de rubros alimenticios estratégicos. Esto es fácilmente comprobable si se revisan las importaciones de arroz realizadas el año pasado a países del ALBA.

-La causa de pérdida de este arroz fue retraso en la permisología para embarcar, lo que ocasionó proliferación de plagas y el rechazo de Cuba para recibirlo. Por supuesto, luego de generar todos los gastos de inspección antes mencionados.

Una de las empresas mixtas que dependen de la CVA, Arroz del Alba, es manejada en su parte cubana por Israel Lugo, quien solicitó el ingreso del destituído gerente general Guillermo Colmenares, funcionario que luego de salir de la anterior gestión en Arroz del Alba por problemas de comisiones y maltrato al personal, se dedicó a ofrecer regalos y hasta fiestas a los directivos cubanos.

El Vice Presidente de Arroz del ALBA, Israel Lugo ha quedado deslumbrado por las ventajas de ser boliburgués y olvidándose de la austera Revolución Cubana, solicitó la asignación de una nueva camioneta (una Silverado doble cabina) además del reingreso de una persona con mas experiencias en negocios y comisiones como lo es el destituído Gerente General Guillermo Colmenares quien está postulado como nuevo gerente de administración de Arroz del Alba.

Mientras tanto, desde hace más de 4 meses no se le paga a los productores que arriman el arroz a las plantas, los recursos financieros fueron malversados para cumplir con las contratistas que debían pagar las comisiones inmediatamente, ejecutando obras de calidad mas que dudosas. Sólo hace falta pasearse por Banco de Pavones (en el estado Guárico) y revisar un poco qué se hizo y cuánto se ha gastado.

Situación especial se refleja con el alquiler de una nueva sede en Barinas, donde se escogió una casa de un allegado de la directiva, pagándose el doble de lo que normalmente costaría ese alquiler, pero además ya se les pagó un año adelantado y están pensando mudarse ahora porque no cumple con los requerimientos.

De manera pues, que hay manos cubanos metidas en más de un sector en Venezuela.

El Nuevo Pais

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