Esta es la verdadera razón por la cual otro venezolano inocente fue condenado a 19 años de prisión | ||||||
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Por Mercedes Montero | ||||||
Sobre este caso de José “Mazuco” Sánchez he señalando desde hace algún tiempo todos los atropellos y violaciones a su proceso. La generalidad con el actual régimen que ha condenado la justicia a muerte, y con ella a los presos políticos venezolanos, siendo el de “Mazuco”, el más reciente. La juez Fabiola Vesga le dictó una sentencia a 19 años de presidio, en un llamado “Juicio Express”, la víspera de la Navidad ignorando no solo su clara inocencia, sino también llevándose por delante la inmunidad parlamentaria que por ley le corresponde, al haber salido electo como diputado por el estado Zulia en las Elecciones Parlamentarias del 26 de Septiembre, 2010. José “Mazuco” Sánchez, quien cuenta con una hoja de servicios absolutamente limpia, era el secretario de Seguridad de la Gobernación del estado Zulia, cuando fue acusado en forma inverosímil de ser cómplice de un asesinato en el que no hay autor material, Algo bien extraño. No es verdad? A lo anterior hay que sumarle que mientras se desenvolvían los acontecimientos Mazuco estuvo ocupado atendiendo toda la tarde a un funcionario extranjero para intercambiar opiniones y discutir proyectos sobre asuntos relacionados con la naturaleza de las funciones de seguridad. La defensa de Mazuco ha probado y vuelto a probar su inocencia. Ha dejado constancia durante los dos años, tres meses y unos cuantos días preso en la cárcel de Ramo Verde, de todas las violaciones a los derechos humanos del comisario, entre los cuales está el traslado de la jurisdicción del Estado Zulia a Caracas. Todas los retardos procesales, así como la negación a la solicitud que, hiciera durante todo ese tiempo de que se le iniciara un juicio oral y público, como forma de probar públicamente y sin lugar a dudas su inocencia. Alguien que es culpable de un delito como el que se le acusa, lo último que solicita es ese tipo de juicio. No hubo explicación racional alguna a la negativa por parte de las autoridades judiciales, para realizar el juicio solicitado. Todo lo contrario, ahora que al comisario le corresponde inmunidad parlamentaria, que le garantiza la libertad a un hombre inocente, que además debe representar a la voz del pueblo que lo votó con ese fin, se le hace un juicio a toda marcha, con el cual la juez actuando en forma contraria a la misión de su cargo, en medio de un Poder Judicial subyugado al Poder Ejecutivo; desconoce todos los derechos humanos del comisario y viola la ley. Al revisar este juicio expreso que ha llevado a Mazuco nuevamente a la cárcel de Ramo Verde, quedan claros los siguientes aspectos: a) Aún correspondiéndole la libertad después de haber salido electo como diputado, pasaron días para darle el correspondiente reconocimiento a su cargo, fue tal la presión pública que le permitieron “la casa por cárcel”: medida esta que aunque es mejor que la cárcel NO corresponde a la justicia. b) El día 29/11/2010, Mazuco fue sacado de su casa en forma abrupta por la Guardia Nacional, trasladado al tribunal de la juez Fabiola Vesga, no se le avisa a sus defensores, la juez le nombra un defensor a conveniencia, se manejan los tiempos del juicio a la velocidad del rayo, se desconoce la orden del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que le dio al comisario la casa por cárcel hasta el 5 de enero 2011, cuando asumiría su curul. Se violan las leyes y la Constitución, pero ni siquiera el TSJ, máximo tribunal del país reacciona para hacer valer su autoridad, ante lo que ha sido una flagrante falta de respeto por parte de una juez de menos rango. c) Todo en el juicio pareciera haber estado planificado para condenar a Mazuco, desde los testigos, la forma con la que la juez trató de cercenar el derecho a su defensa, las acciones contra sus abogados defensores, las horas de las audiencias del juicio, las condiciones de maltrato a las que ha sido sometido el preso. De acuerdo con las declaraciones del periodista Leocenis García las credenciales presentadas por el testigo Angel Ciro Díaz Serrano, como trabajador de la Asamblea Nacional (AN), que fueran emitidas por Vladimir Flores, director de seguridad de la Asamblea Nacional, hermano de la actual presidente de la AN, Cilia Flores, es una demostración de los vicios del juicio. En una de las últimas audiencias el testigo que declararía en contra de Mazuco asistió encapuchado. ¿En que tribunal que se haga justicia se permite tal aberración? Es lógico suponer que quien declara encapuchado lo más probable es que esté dando falso testimonio y por lo tanto no quiera ser reconocido. Si se tratara de la seguridad personal del testigo, hay formas correctas y sanas de lograr la declaración preservando la seguridad del testigo y el derecho a la justicia y a la legítima defensa del acusado. . d) Mazuco tiene una afección lumbar, que amerita tratamiento médico especializado, que no le permite estar sentado por más de media hora, sin embargo las audiencias toman larguísimas horas, lo cual le causa al comisario un dolor extremo que lo ha llevado a tener que ir al tribunal en silla de ruedas, ya que el comisario ya no puede caminar. Tampoco le es permitido comunicarse con la gente que asiste a esa farsa de juicio simplemente para mostrarle amistad, se lo deja sin comer por horas hasta que llega al agotamiento. Al parecer este sadismo, toda esta tortura le proporciona un gran gozo a quienes están encargados de hacer”justicia”. La verdad es que tomando en cuenta todas las características de este juicio, solo se necesita ver la actuación de la juez Vesga, para tener bien claro el significado de la palabra injusticia. Después de tamaña anomalía se podía esperar cualquier cosa menos justicia, para aquel a quien le fue diseñada y perfectamente planificada una carrera de obstáculos que crecen y se agudizan a medida que se avanza en el juicio, para que demuestre inocencia ante un tribunal que ha decidido a priori su culpabilidad a conveniencia de los intereses de la dictadura. "La jueza Vezga condenó a toda la familia y a nuestro pequeño de 4 años con esa decisión… la justicia venezolana no existe", y pone sus esperanzas en la justicia divina. Así lo expresó su esposa María de Sánchez, esposa de Mazuco. Esta es la verdadera razón por la cual otro venezolano inocente fue condenado a 19 años de prisión. Los venezolanos esperamos la vuelta a la democracia, que haya justicia y estado de derecho. Que a todos nos sirva de lección el no volver a creer en falsos profetas, a no volver e extender cheques en blanco. |
29/12/10
Condena a Mazuco no tiene precedentes
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