La Sra. Eva Golinger, de nacionalidad incierta, mercenaria a sueldo del dictador Hugo Chávez y quien lo acompaña en sus viajes como "asesora" en Relaciones Públicas, no tiene muy claro lo que es el pueblo. Un pueblo, el pueblo, no es una masa informe de limosneros, ni es una legión de ignorantes, ni un rebaño amorfo al cual se le puede manejar al antojo de los déspotas. Un pueblo es la materia prima de una nación, es la suma de todos quienes viven en un territorio incorporado como país. El pueblo de Venezuela es blanco, negro, zambo, mestizo, de ojos redondos y de ojos rasgados, andan en carro o a pié. Comparten su lugar de nacimiento o su nacionalidad adquirida, son parte integral de una sociedad. Este concepto es extraño a la Sra. Lewinsky, perdón, Golinger y ello le permite tratar de insultar a un representante del pueblo, elegido por amplia mayoría de votos de los electores, quienes son, todos, parte del pueblo venezolano. La Golinger dice que nadie puede creer que la Sra. María Corina Machado sea representante del pueblo. Pero, es que lo es, Sra. Golinger. Fue elegida para serlo. Respete usted esa fórmula democrática elemental de la elección, no sea fascista. Como el nuevo presidente nominado para la AN, quien dice que "le permitirá a los diputados de la oposición la entrada a la Asamblea", usted no tiene idea de lo que es la democracia. María Corina Machado no está en la AN porque le dió un pollo frito a alguien para que votara por ella. Fue elegida por hombres y mujeres libres, miembros del pueblo venezolano.
La Golinger, pseudo-venezolana, ofende al pueblo venezolano al sugerir que solo la gente que no tiene pensamiento propio puede ser pueblo. Pueblo somos todos, Golinger. Más aún, el pueblo que votó en contra de su dictador es mayoría. Por ello, La Sra. Machado es una legítima representante del pueblo.
Pero, quien es usted, Golinger?
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