Chávez y su brigada en Hollywood: que busca cada quien?

Que tienen Naomi Campbell, Sean Penn, Oliver Stone, Dannny Glover, Kevin Spacey, Tim Robbins and Harry Belafonte en común? Todos y todas se han montado en un avión de Petróleos de Venezuela, la línea aérea de la farándula hollywoodense. Naomí Campbell pasó dos o tres dias de huésped de Hugo Chávez, sobretodo hablando de finanzas, hasta que se fue a buscar diamantes en Liberia. Oliver Stone ha visitado a Chávez varias veces y ha recibido significativa ayuda de Chávez ( Se dice que fueron diez millones de dólares) para un documental donde el protagonista es…. Hugo Chávez. Harry Belafonte visitó a Chávez en más de una ocasión, gastos todos pagados por Bernardo Alvarez desde la embajada en Washington, como experto en Sociología Afro-Venezolana, mostrando su preocupación por la vida de los habitantes de Barlovento. Danny Glover ha sido asiduo visitante de Chávez y es quien le ha sacado mayor provecho, hasta ahora, a su desinteresada amistad. Recibió $18 millones para hacer una película sobre Toussaint L’Overture, el héroe haitiano. Eso fue hace tres o más años y todavía la película no está lista (ni lo estará jamás). Kevin Spacey y Tim Robbins son simplemente anti-Bush y ello los llevó a gravitar hacia Chávez, pensando que si Chávez insultaba a Bush debía ser una maravilla. De los visitantes hollywoodenses de Chávez estos dos son apenas “pendejos sin fronteras” y no parecen tener ningún deseo de quitarles plata a los venezolanos.

Sesn Penn proablemente va a ser el más dañino para nosotros.Ya está planificando una película, la cual sería financiada… adivinen ustedes, por Petróleos de Venezuela. Penn, como Glover, es un admirador de todo lo que sea dictadura y botas: Castro, Chávez, Ortega. En estos momentos está o acaba de estar en Venezuela, visitando La Villa del Cine, a ver si puede hacer su película allí. Como Glover, Penn ha tomado interés especial en Haití, así como hay otros que se hacen abanderados del Oso Polar o del calentamiento global como pasaportes a la notoriedad.

Y que será lo que quiere Chávez? Simplemente mostrar que tiene público en un sector influyente estadounidense, el lobby hollywoodense. Este es un complemento de sus esfuerzos de cabildeo en Washington, asistido por firmas como Patton Boggs y de su programa de combustible subsidiado para los “pobres” de los Estados Unidos, coordinado por CITGO y ese angelito llamado Joe Kennedy, o en el sector académico e intelectual donde suenan Mark Weisbrot y varios profesores universitarios a lo Miguel Tinker-Salas (Pomona College). La expulsión de Bernardo Herrera le ha restado un hábil hombre de Relaciones Públicas en Washington mientras que un organismo llamado Venezuelan Information Office, VIO, parece haber cerrado sus puertas debido a su pobre rendimiento. Algunos cónsules o empleados de los consulados chavistas se han hecho notorios por ser anti-semitas o pornógrafos, lo cual no le ha hecho bien a la imagen de nuestro dictador en California y Florida.

A pesar del inmenso gasto y el uso intensivo de aviones de petróleos de Venezuela, Hugo Chávez parace estar perdiendo la batalla de la opinión pública en los Estados Unidos.