El Gobierno de Venezuela cerró filas el viernes en torno a la necesidad de mantener en el poder al presidente Hugo Chávez, quien convalece de un cáncer en Cuba desde hace tres semanas, mientras el país petrolero enfrenta un escenario incierto sobre su futuro político.
Venezuela seguía consternada tras la dramática revelación de la noche del jueves, cuando el militar retirado admitió públicamente que debieron someterlo a dos cirugías en La Habana y que le extrajeron un tumor con células cancerígenas.
El vicepresidente Elías Jaua dijo que Chávez, de 56 años, está a cargo del Gobierno y que no hace falta aplicar un plan de contingencia para sustituirlo. La Constitución establece que, en caso de imposibilidad física, el mandato debe ser completado por el vicepresidente.
“Las atribuciones establecidas en la Constitución le son competentes a él en cualquier lugar del mundo en que esté; de manera en que tiene la plenitud de sus atribuciones”, señaló Jaua a periodistas.
Chávez es una presencia dominante en la vida pública de Venezuela y ya había anticipado que se postularía en el 2012 tentando un nuevo mandato de seis años.
La necesidad eventual de tener que reemplazarlo temporalmente por razones de salud comienza a dar muestras de las distintas pujas de intereses cruzados que existen entre integrantes del Gobierno, del partido oficialista y parte de las Fuerzas Armadas, dijeron fuentes vinculadas al Estado.
“Chávez es y será el líder indiscutible de la revolución y es el jefe de Estado y jefe de Gobierno. Aquí el que manda es Chávez”, dijo el ministro de Energía, Rafael Ramírez, uno de los hombres más cercanos al presidente en un acto con trabajadores.
El estado de salud del líder socialista, quien apareció más delgado y moderado en un discurso completamente leído de 14 minutos en televisión, repercutió en los mercados, impulsando a los bonos venezolanos al alza por especulaciones de un eventual cambio de liderazgo.
Una fuente cercana al equipo médico que sigue el tratamiento de Chávez dijo a Reuters que su diagnóstico revela hasta ahora una condición delicada, que requeriría un agresivo tratamiento que puede durar meses.
El Gobierno no ha dado detalles de cómo evoluciaría la enfermedad ni de los cuidados que requerirá.
La fuente indicó que se estaría acondicionando un ala del Hospital Militar de Caracas para recibirlo en los próximos días, cuando el mandatario se haya recuperado de las intervenciones.
REGRESO INCIERTO
La enfermedad del mandatario, que desde hace 12 años impulsa un modelo de alta intervención estatal en todos los estratos de la economía, toma a su partido sin un norte claro sobre un eventual reemplazo para las presidenciales del 2012.
“Las interrogantes se mantienen no sólo sobre si el presidente estará en condiciones de regresar al país para asumir sus funciones en pleno, sino también sobre si participará en las presidenciales del 2012″, dijo la firma IHS Global Insight en un reporte a clientes.
Sin embargo, portavoces del Gobierno salieron al paso y afirmaron que su líder volverá “pronto” al país.
La televisión estatal difundió el viernes un video grabado dos días atrás donde se ve a Chávez junto a un jefe militar, el canciller Nicolás Maduro y su hermano mayor y gobernador del estado Barinas, Adán Chávez.
“He decidido seguir rigurosamente el plan de recuperación (…) Mi primer deber en este momento como revolucionario es recuperar plenamente la salud, así lo he asumido. Agradezco su compresión y apoyo”, comentó el mandatario.
En su mensaje a la nación de la víspera, Chávez había informado que el tratamiento médico “no acepta apresuramientos ni presiones de ningún tipo”, lo que abre la posibilidad de que no regrese a tiempo para encabezar los actos del 5 de julio, cuando se conmemoran 200 de la independencia.
La coalición opositora Mesa de la Unidad (MUD) deseó la pronta recuperación del mandatario, pero lo instó a “afrontar los problemas del país”.
“No deja de ser Chávez el jefe del Estado, pero sí deja de ser jefe de Gobierno (…) el Gobierno no funciona normalmente, no está dando respuestas a los problemas de la vida real”, dijo el secretario ejecutivo de la MUD, Ramón Guillermo Aveledo.
Más temprano el viernes, uno de los líderes de mayor rango del Ejército, Henry Rangel, aseguró que el país estaba en calma.
“El orden público y el orden interno se han mantenido en un esquema de tranquilidad, paz y sosiego (…) No se ha ameritado en ningún momento el empleo de la fuerza policial”, dijo Henry Rangel, uno de los líderes de mayor rango del Ejército, en una entrevista con una cadena de televisión.
SOLIDARIDAD LATINOAMERICANA
En las calles, los simpatizantes del carismático y polémico líder daban muestras de apoyo, mientras que en las oficinas públicas se pegaban en los muros oraciones por su salud.
“Estamos contigo, una y cien veces (…) sabemos cómo te vamos a pagar: saliendo a la calle, defendiéndote, dándote amor, solidaridad y rezando”, dijo una de sus seguidoras en un acto.
El presidente de Paraguay, Fernando Lugo, quien padeció de cáncer el año pasado, también expresó su solidaridad, mientras el colombiano Juan Manuel Santos dijo que “hace votos” por su salud. Lo mismo hicieron diversos gobiernos de la región.
Chávez ha conducido en el último lustro a Venezuela hacia un modelo socialista signado por frecuentes expropiaciones y nacionalizaciones de industrias esenciales, desde el petróleo hasta el comercio expandiendo el tamaño del Estado.
En paralelo, ha logrado ejercer un mayor dominio sobre la estatal Petróleos de Venezuela, lo que le da recursos para la continuidad de su proyecto político y ampliar la cooperación con aliados como Cuba, China, Irán, Brasil, Ecuador y Argentina.
Caracas anunció que postergó para el segundo semestre una cumbre regional ante la ausencia del líder socialista.
Reuters
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