Para esto son los reales.

VenEconomía Opina

Contra todo pronóstico agorero, ya las cartas están echadas para la realización de las elecciones primarias de la Mesa de la Unidad.

Todo inscrito en el Registro Electoral podrá elegir el 12 de febrero de 2012 entre cinco candidatos -Diego Arria, Henrique Capriles Radonski, Leopoldo López, María Corina Machado y Pablo Pérez- al abanderado de la oposición democrática que se batirá en los comicios presidenciales, del 7 de octubre de 2012, con el presidente y eterno candidato Hugo Chávez.

El Gobierno, por su parte, sigue enfilado en intentar el descrédito de la oposición para así opacar los logros de ésta en el rescate de la gobernabilidad y la institucionalidad democrática en Venezuela.

El propio presidente Hugo Chávez este domingo, criticó vía telefónica el cobro que hizo la MUD a los candidatos a las primarias, catalogándolo como una vagabundería y afirmando que el requisito es una evidencia del "grado de degeneración al que ha llegado la burguesía".

Obvia con cinismo el mandatario que todo proceso electoral, sea primario o final, tiene un costo para las organizaciones participantes, incluyendo las del oficialismo. Y omite ex profeso que el Consejo Nacional Electoral "cobra a los partidos políticos para poder pagar los servicios que contrata a terceros" que, como lo explicó el rector Vicente Díaz, ingresa al ente comicial vía Fisco Nacional.

Para poner los puntos sobre las íes en esta materia, vale resaltar la información publicada en el diario El Mundo de este jueves, en la cual la MUD explica a dónde van a parar los reales de los candidatos.

Afirma la MUD que el costo de las primarias llega a Bs.F.23,02 millones, de los cuales Bs.F.12,66 millones (55%) se destinan a cubrir el costo de la asistencia del CNE que, entre otros gastos incluye: la instalación de 7.570 mesas electorales en el territorio nacional, el adiestramiento de los miembros de mesa, boletas electorales, operadores de máquinas y Plan República. Con los Bs.F.10,36 millones (45%) restantes se cubren los costos de operatividad de la Comisión Electoral de las Primarias de la MUD, que incluyen: logística, transporte de actas, almacenaje, escaneo de actas, observación nacional e internacional, selección de miembros, seguridad y comunicación.

También omite el mandatario que durante estos largos 13 años se han puesto trabas y muros para el financiamiento de los partidos políticos, e incluso para las organizaciones no gubernamentales que disienten de su proyecto político. No sólo se reformó la Ley de Financiamiento de Partidos Políticos, para cortarle los ingresos que éstos recibían del Estado según su peso electoral, sino que en diciembre de 2010 se promulgó una Ley de Defensa de la Soberanía Política y Autodeterminación Nacional que cerca económicamente a todas las organizaciones civiles del país.

Esto sin contar con la mordaza fiscalizadora y el chantaje que impone a las empresas para evitar su colaboración espontánea a los partidos políticos, como era tradicional.

Más aún obvia el mandatario, el uso y abuso cínico que el partido de Gobierno PSUV hace de los recursos del Estado para mantener en marcha su eterna campaña electoral, a costa del dinero de todos los venezolanos.