Gráfica: Antonini Wilson y Antonio Canchica - Cortesia del FBI
El sábado pasado, a las tres de la mañana fue asesinado el Sargento Técnico de Primera (GN) Antonio José Canchica en Fuerte Tiuna. El sargento era Director del despacho del actual Ministro de la Defensa, General en Jefe (Ej.) Henry de Jesús Rangel Silva. Canchica era un experto en inteligencia y Agente de confianza del Ministro Rangel quien, cuando era Director de la DISIP lo envió a Miami para tratar de negociar con Antonini Wilson el famoso maletín para la campaña presidencial argentina, capturado por agentes de la aduana de Buenos Aires con 800.000,00 dólares, ilegalmente enviados por el Presidente Saliente para la campaña electoral de Néstor Kirchner y su mujer Cristina.
Nos informan que Canchica fue torturado y lanzado desde el piso 4,
edificio 8-1 en Fuerte Tiuna. La razón: miedo a que hablará antes del
inminente final del régimen Castro-comunista en Venezuela.
Aparentemente, Canchica sabía mucho y clamaba que, mientras sus jefes
estaban todos buchones, ricos y poderosos, el, quien había arriesgado el
pellejo, durante las acciones, dignas de películas de espionaje, cuando
escapo en una lancha rápida desde Miami para no ser capturado por el
FBI y la CIA quienes les pisaban los talones y en aguas internacionales
fue recogido por una lancha del G2 cubano y conducido hasta la Embajada
venezolana en La Habana.
Canchica, el espía venezolano en misión oficial con poder para negociar
el silencio de un delito cometido en cuatro naciones; el James Bond de
esa trama, no tenía ni un bolívar para garantizar su futuro. El pobre
Agente de inteligencia tenía que conformarse con vivir en una vivienda
en guarnición alquilada en Fuerte Tiuna y con tanto que sabía sobre las
andanzas de los narcos generales, consideraría que debería recibir su
parte del botín o se vería obligado a hablar.
A Canchica lo mantuvieron por un largo tiempo en la embajada de
Venezuela en Cuba, mientras se enfriaba el escándalo de la maleta
argentina de Antonini Wilson. Este crimen forma parte del canibalismo
castro-chavista que se ha desatado en los últimos meses. De esa manera
desaparecieron a un testigo clave en las aventuras de un General en Jefe
solicitado por narcotráfico por las autoridades norteamericanas.
Según Pablo Medina, el sargento fue enterrado en el cementerio de la
Guairita en el sector 22C N72. “Henry Rangel Silva me dice que estaba
mandando a un hombre de su entera confianza a verme, que me van a dar
los recibos, el dinero, para que yo me calle la boca y no hable con
nadie", explicó Antonini Wilson después de haber sido detenido por el
FBI en el 2007.
Recientemente Antonini declaro ante los medios que no creía la versión
del suicidio del Sargento Canchica, suministrada por el gobierno del
Presidente Saliente. En estos tiempos de escape, cuando al régimen le
quedan pocos días, todo sale a la luz pública. Algunos queman oficinas
gubernamentales, otros destruyen papeles comprometedores o traspasan
propiedades a nombres de testaferros, pero los más temerosos y con
poder, ordenan asesinar a testigos indeseables. Es por eso que el Cnel.
(GN) Eladio Aponte Aponte huyo a USA, para salvar su vida, ya que su
conciencia estaba a punto de reventar por sus crímenes cometidos por
ordenes de Chávez, entre los que se encuentra el haber condenado a 30
años de prisión a los Comisarios y policías que cumpliendo con su deber
de defender a la ciudadanía salvaron cientos de vidas durante los
tiroteos de Puente Llaguno, cuando pistoleros afectos al régimen
masacraron a tiros a toda una población indefensa que marchaba
pacíficamente hacia Miraflores.
Ese encuentro entre Canchica y Antonini, sin embargo, quedó
inmortalizado en una filmación y unas cuantas fotografías. El
periodista del diario venezolano El Nacional, Javier Mayorca reportó por
Twitter que falleció uno de los protagonistas centrales del capítulo
estadounidense del "Caso Antonini". Se trataría de Antonio José Canchica
Gómez, el emisario que envió a Estados Unidos, el entonces jefe de la
inteligencia venezolana, Henry Rangel Silva.
Ahora, casi cinco años después de aquella reunión en Plantation (en las
afueras de Fort Lauderdale), al parecer Canchica murió. Según el
periodista, el Sargento Técnico de Primera del Ejército venezolano,
falleció a los 41 años al caer del techo de una vivienda en el Fuerte
Tiuna. Con el asesinato del Sargento Canchica se cierra un capítulo más
del régimen de terror castro-comunista encabezado por el Presidente
Saliente.
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