CARACAS
El gobierno venezolano está estudiando ampliar la flota de aviones chinos K-8 una vez reciba y opere el primer lote, que llegará a Venezuela en enero de 2010, y tampoco descarta adquirir otras naves de combate, informó el jueves el ministro de la presidencia Luis Reyes.
Reyes indicó que la Fuerza Aérea venezolana estaría interesada en adquirir aviones ‘‘de combate intermedio, tal como el L15'', reseñó la agencia estatal de noticias ABN, aunque aclaró que la decisión será tomada luego de operar los K-8 durante dos meses.
El L-15 es un avión de entrenamiento avanzado y ataque ligero de última generación fabricado por China.
En un encuentro con directivos de las empresas aeronáuticas chinas responsables de la entrega, el ministro revisó los acuerdos firmados por el presidente Hugo Chávez en setiembre 2008.
"Avanzan con mucho éxito'', celebró Reyes.
Por su parte, Li Yuhai, representante de la industria aeronáutica china, aseguró poder "ofrecer casi todos los tipos de avión'', por lo que invitó a Reyes a visitar el país asiático en caso de decidir ampliar la flota.
Venezuela adquirió a China 18 K-8, un avión biplaza que alcanza una altura de 40.000 pies y que fue desarrollado conjuntamente por China y Pakistán como un aparato de entrenamiento ligero que, eventualmente, puede utilizarse en operaciones de apoyo a unidades de tierra.
La aeronave tiene capacidad para entrega de armamento y están equipados con bombas livianas, cohetes y ametralladoras.
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