Con la amenaza de intervención en Honduras si no se produce la reinstalación de Zelaya en el poder, en un papel que no le corresponde porque insistimos que este es un problema entre hondureños que tiene que ser resuelto por los hondureños en Honduras, la OEA está asesinando el concepto universal de libertad y soberanía.
Pero que más puede esperarse de un organismo que está bajo la égida de un mediocre como Insulza al que sólo le interesa la instauración de sus desprincipios ideológicos y al que lo tiene muy sin cuidado su papel de conciliador y consejero de las representaciones que allí hacen vida política, pero política con letra muy minúscula, porque es esa política clientelista y de manipulación de intereses que hacen perfecto juego con personalidades mediocres como la que hemos mencionado.
Y no puede sorprendernos la velocidad del organismo para responder a las demandas de sus congéneres politiqueros, léase Kirchner, Chávez, Morales, Correa, Moratinos, y paremos de nombrar porque nos atacan las nauseas, en demostración de su contubernio ideológico; y además retomar nuestra rabia cuando recordamos que ese mismo organismo se ha hecho consuetudinariament e de la vista gorda ante las innumerables denuncias hechas por los venezolanos oprimidos para que fijen una posición crítica y de investigación al menos con relación a las circunstancias en que estamos sumidos los venezolanos por los atropellos y desmanes de este régimen sátrapa. No hemos tenido ni asomo de respuesta alguna, porque Insulza y la caterva de cómplices del comunismo trasnochado que medran en los asientos de la OEA , sólo están preocupados por proteger al orate sabanetero que es su mecenas y proveedor de recursos para que puedan mantener su cómoda vida, mientras Venezuela se desangra por la corrupción imparable y galopante que diezma nuestros haberes.
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