23/10/09
"Chávez ataque relámpago" en el hemisferio.
Hugo Chávez está llevando a cabo una política y financiera "guerra relámpago" en países como Honduras, Nicaragua, Panamá, Bolivia, Paraguay, Costa Rica, Perú y Colombia. Hasta ahora, las respuestas del país a sus esfuerzos han sido bastante agresivos lánguida, con la excepción de Honduras, donde una reacción cívica y militar rápida ha comprobado el progreso de su ofensiva.
El caso de golpe de Estado de "Honduras" ya es bien conocida. El ex presidente Zelaya intentó un golpe de Estado, la realización de un referéndum ilegal para cambiar la constitución para permitir la re-elecciones presidencial indefinida, un cambio que Chávez ya había impuesto a los venezolanos. Chávez promovió esta acción prestándole apoyo logístico y financiero. Después de ser derrocado, Zelaya quedó totalmente dependiente del dinero de Chávez y el apoyo de aeronaves para todos sus movimientos en el hemisferio.
En Nicaragua los miembros de la Corte Suprema alineados con el presidente Daniel Ortega se reunió para "anular" el artículo 147 de la Constitución vigente que prohíbe la reelección presidencial. Alejandro Serrano, ex presidente de la corte ha llamado a esto la acción de un "golpe vulgares", y agregó "Están manipulando la constitución y el imperio de la ley en una forma impensable, ya que el Tribunal Supremo no tiene la autoridad para declarar la inconstitucionalidad de la Constitución ". Esta acción confirma las pretensiones de aquellos que dicen que tanto la de Honduras y Nicaragua, las iniciativas responden a una estrategia concertada promovida por Hugo Chávez, para instalar el fascista-socialista de los regímenes autoritarios, como en muchos países del hemisferio como sea posible. La Organización de Estados Americanos aún tiene que decir una palabra sobre el golpe de Estado de Nicaragua, mientras continúa el debate sin rumbo sobre Honduras.
En Panamá, el Ministro de Gobierno y Justicia, José Raúl Mulino, se sorprendió al encontrar a miembros de la embajada de Venezuela dando conferencias en todo el país en el que la llamada revolución bolivariana de Chávez se presenta como la solución para Panamá. Cuando se le preguntó acerca de estas acciones el embajador de Venezuela en Panamá, Jorge Luis Durán, afirmó que tenían "derecho a informar a la población panameña acerca de los resultados positivos de la revolución de Chávez". Unos 50 grupos pro-Chávez han establecido ya en Panamá, lo que ha llamado la atención del nuevo presidente del país, Ricardo Martinelli, que es un firme oponente de Chávez. El embajador de Venezuela se está llamando al Ministerio de Relaciones Exteriores de explicar es acciones. El ex vice-presidente de Panamá, Guillermo Ford llamado a estas acciones por la embajada de Chávez "una falta de respeto e intervencionista".
En Bolivia, Chávez ha estado financiando la campaña presidencial de Evo Morales y es intervenir abiertamente en los asuntos internos de ese país. Mientras que en la ciudad boliviana de Cochabamba, defendió la reciente adquisición de armas y aeronaves por Bolivia empobrecida, acusando a los críticos paraguayos de estas adquisiciones de "conspirar para derrocar a [Paraguay] el presidente Fernando Lugo".
En Costa Rica el gobierno de Hugo Chávez ya ha instalado el llamado "Base de la Paz", diseñado para contrarrestar el acuerdo de cooperación militar entre Colombia y los EE.UU. La reacción del gobierno de Costa Rica ha sido lento. El Ministro de la Presidencia, Rodrigo Arias, dijo que esto podría representar una intervención del régimen venezolano en la vida de Costa Rica y ha pedido una investigación, mientras que el presidente Oscar Arias ha dicho que "Venezuela no tiene nada que enseñar a los costarricenses sobre la paz" . Bases similares ya se han instalado por Venezuela en Cuba y Nicaragua.
En el Perú, Venezuela ha promovido la instalación de las casas ALBA, que esencialmente transmitir propaganda a favor del movimiento socialista liderado por Chávez. El gobierno peruano se ha quejado de leve y está empezando a investigar las transferencias de dinero hechas por el régimen venezolano a Ollanta Humala, candidato presidencial izquierdista derrotado por el actual presidente Alan García.
En Colombia, la actividad política del régimen de Chávez es más intensa en relación con las FARC, el grupo terrorista que recibe su apoyo logístico y financiero. La senadora colombiana Piedad Córdoba, amigo de, y portavoz ocasional de las FARC, es uno de los frecuentes visitantes al palacio presidencial venezolano, y se rumorea que reciben ayuda financiera significativa desde el gobierno de Venezuela para ayudar en sus actividades contra la democracia colombiana.
Ninguna de estas actividades han recibido ninguna atención por parte de la Organización de Estados Americanos, OEA, ya su secretario general, José Miguel Insulza, está fuertemente sesgado a favor de la ideología promovida por Chávez. Insulza está buscando activamente la reelección como líder de esta organización.
La actitud de los Estados Unidos en relación con la guerra relámpago "de Chávez" ha sido pasivo, aun cuando Chávez ha extendido sus iniciativas para el mundo académicos de EE.UU., Washington, grupos de reflexión, de Hollywood e, incluso, el Congreso de EE.UU., donde se está haciendo modestos, pero avances claros. El gobierno estadounidense sigue definiendo el derrocamiento del ex presidente de Honduras, Zelaya como un "golpe militar", a pesar de la abrumadora evidencia en contrario, que incluye un informe de los EE.UU., el Congreso.
El hemisferio hace caso omiso de la amenaza de Chávez en su cuenta y riesgo.
Gustavo Coronel
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