ABC de España 3-3-10

Chávez: «Es una ofensiva orquestada por España y EE.UU.»

El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, reiteró este martes que el auto del juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco en el que se observan indicios de "cooperación gubernamental" de Caracas con la banda terrorista ETA y con las FARC responde a una "gran ofensiva" orquestada por Estados Unidos y España para evitar la unidad de Iberoamérica y contrarrestar el "gran éxito de Venezuela".
Según el mandatario venezolano, la aparición del informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en el que se acusa a su Gobierno de estar minando gravemente las libertades civiles de los venezolanos, el auto del juez de la Audiencia Nacional y la visita a varios países de América Latina efectuada esta semana por la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, son una respuesta de Madrid y Washington a la creación de la Comunidad de Estados Americanos y del Caribe (CELAC); un nuevo organismo regional que asumirá muchas de las funciones de la Organización de Estados Americanos (OEA) pero en el que no estarán incluidos ni Estados Unidos ni Canadá.
La CELAC fue creada a principios de la semana pasada en una cumbre celebrada en Cancún en la que estuvieron presentes los jefes de Estado de todas las naciones iberoamericanas, pero no se constituirá oficialmente hasta 2011, en una cumbre que tendrá lugar en Caracas. "Eso no le gusta al nuevo imperio (EEUU) ni al viejo imperio (España). Mucho menos les gusta que se haya decidido que la cumbre donde vaya a nacer sea precisamente acá, en Caracas", aseguró Chávez en declaraciones efectuadas a la cadena estatal venezolana mientras se encontraba reunido con sus ministros en el palacio de Miraflores, sede de la Presidencia venezolana. "Van a tratar de sabotear la reunión de Caracas", agregó. "Mientras Venezuela es reconocida por el mundo, hemos visto como se ha desatado una orquesta. Todo esto está orquestado por el gran éxito de Venezuela y de nuestros gobiernos en Cancún", destacó el mandatario venezolano. "El imperio comenzó pronto su ataque a través de la OEA, de la Audiencia (Nacional) de España, desde Washington el Gobierno de Washington agrediendo y al mismo tiempo la secretaria de Estado en una gira por América Latina. . . en fin, es una gran ofensiva contra nosotros", apostilló.


El régimen chavista se solidariza con «la lucha antiimperialista» de ETA

El abogado abertzale Joseba Agudo ha jugado un papel relevante en la buena acogida que los etarras encuentran en Venezuela

D. MARTÍNEZ / J. PAGOLA MADRID
Al amparo de Hugo Chávez, ETA encuentra en Venezuela la impunidad que sólo le queda ya en algún triste callejón del País Vasco para justificar sus crímenes, con el delirante argumento de que «Euskal Herria» libra una «lucha antiimperialista» contra el Reino de España. En esa labor ha jugado un papel destacado el abogado de Askatasuna Joseba Agudo, detenido el pasado mes de octubre en Hendaya.
En efecto, mientras las Fuerzas de Seguridad le asfixian en Francia y España, ETA toma oxígeno en su santuario de Venezuela. El pasado mes de febrero, el centro histórico de Caracas acogió la «Semana Internacional de Solidaridad con Euskal Herria», que concluyó con una ofrenda floral a Simón Bolívar bajo el lema «¡por el socialismo, libertad para Euskal Herria!». La intención era clara, comparar al «Libertador» con los «gudaris» de ETA, desde Xabi Etxebarrieta a Ibón Gogeascoechea, pasando por los «pakito», «terneras», «makarios», «kubatis», «parots», «urrusolos», «dienteputos» y «txerokis». En el transcurso del acto celebrado, casualidad, el 12, «Día de la Batalla de la Victoria», chavistas simpatizantes de ETA mostraron su «solidaridad con «Euskal Herria y su lucha». Además se leyó un comunicado del denominado «Colectivo de Solidaridad Pakito Arriaran», -etarra muerto con la guerrilla salvadoreña-, en el que se reivindica el derecho a la autodeterminación del País Vasco. Se aludió también al «régimen de opresión» que sufre por los «Estados imperialistas español y francés». Un día antes, el 11 de febrero, la Universidad Bolivariana de Venezuela quedó habilitada como «herriko taberna» para acoger un debate en el que se profundizó sobre «la historia de represión y resistencia en Euskal Herria». Muestra del pluralismo de los participantes, todos coincidieron en vincular «la lucha antiimperialista que hermana los pueblos venezolano y vasco con la lucha por la construcción del socialismo». Las jornadas contaron con la logística del Movimiento Continental Bolivariano, la plataforma creada al amparo de Chávez, en la que convergen ETA y las FARC.
La buena acogida de ETA en Venezuela se debe a los «buenos oficios» del abogado abertzale Joseba Agudo, detenido el pasado 28 de octubre en Hendaya. Agudo negoció en 2006 un acuerdo por el cual el Ejecutivo de Chávez se comprometía a indemnizar a los etarras Sebastián Etxaniz y Juan Víctor Galarza para compensarles por haber sido detenidos y entregados a las autoridades españolas. Además, se establecía la concesión de la nacionalidad a otros cuatro etarras, entre ellos José Lorenzo Ayestarán, detenido el pasado fin de semana en Francia, país al que se había trasladado desde Venezuela para reincorporarse a la banda. El acuerdo con el abogado proetarra se anuló al hacerse público.


Chávez se burla de la Audiencia

LUIS AYLLÓN MADRID
Hugo Chávez se burló ayer del auto del juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco en el que denuncia la «cooperación gubernamental» de Venezuela en la colaboración entre ETA y las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia). Desde Montevideo, el mandatario venezolano achacó ante los periodistas el auto del magistrado a «rezagos de un pasado colonial». Mientras, el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, que dijo estar a la espera de unas explicaciones detalladas de las autoridades de Caracas, señaló en Ereván (Armenia) que ve en Hugo Chávez «voluntad de cooperar» para esclarecer el asunto.
Chávez, que se refirió irónicamente a la Audiencia Nacional como «la Real Audiencia», insistió en su tesis: «Son restos todavía, tristes restos, de las antiguas cadenas que algunos quisieran colgarnos de nuevo aquí en el cuello. Pero nosotros somos libres». El dirigente bolivariano, que señaló que a Bolivar también le habrían llamado terrorista si el término hubiera estado acuñado en el siglo XVIII, aseguró que todo «responde a una misma orquesta«, porque «detrás de todo -dijo- está el imperio yanqui».
Compromiso
No es probable que Chávez se expresara en estos términos en la conversación telefónica que mantuvo en la noche del lunes con Moratinos, y de la que el ministro ha sacado tan buena impresión sobre la voluntad del presidente venezolano de aclarar las cosas.
Fuentes diplomáticas consultadas por ABC aseguran que Chávez, aunque rechazó el contenido del auto judicial y cualquier implicación personal en una relación con ETA, se comprometió a investigar si algún cargo de nivel medio de su Gobierno ha podido actuar de manera que haya inducido al juez Velasco a hacer las acusaciones que hace.
En cualquier caso, el Ejecutivo español esperará a conocer las explicaciones que ofrezca Chávez sobre el asunto antes de tomar cualquier medida. Por el momento, no habrá ninguna protesta diplomática, ni hay intención de convocar al embajador venezolano en Madrid, después de la conversación que Moratinos, que se encuentra en una gira por el Cáucaso, mantuvo con su presidente y con el ministro de Asuntos Exteriores, Nicolás Maduro.
Exigencias del PSOE
Por su parte, el portavoz del Grupo parlamentario socialista, José Antonio Alonso, se mostró con una mayor firmeza que el titular de Exteriores. Ayer declaró que espera que el Gobierno venezolano ofrezca unas explicaciones «lo suficientemente convincentes y consistentes», porque, en su opinión, «sería gravísimo» que se hubiera dado «cualquier instancia de colaboración como la que se está sugiriendo». En la misma línea, la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, dijo a Punto Radio que confía en que esas explicaciones sean dadas «de manera inmediata». Más comedida se mostró la secretaria de Política Internacional, Elena Valenciano, que pidió «cautela y prudencia» hasta conocer el resultado de las investigaciones judiciales, antes de «sentenciar políticamente a Venezuela».
Margen de confianza
Lo cierto es que, según las fuentes consultadas por este periódico, en el Ejecutivo, que nunca ha optado por una política de confrontación con el líder bolivariano -ni siquiera tras sus ataques a España después del famoso «¿por qué no te callas?» del Rey-, se quiere dar un margen de confianza a Chávez. Se espera que sea capaz de despejar cualquier duda sobre las relaciones de su Gobierno con la banda terrorista y demuestre que el rechazo que manifiesta a las acusaciones del juez Velasco tiene fundamento.
En este sentido, se subraya que cuando, en otras ocasiones, desde España se le ha pedido que actuara con firmeza sobre ETA, Chávez lo ha hecho. Así, por ejemplo, se recuerda que en 2002, aún con José María Aznar en el Gobierno, autorizó la extradición de tres etarras y que, a finales de 2006, a instancias de España echó marcha atrás en la decisión de dar la nacionalidad venezolana a cuatro miembros de ETA, lo que hubiera impedido su extradición. Además, revocó la concesión de una indemnización a los entregados a las autoridades españolas. Chávez achacó aquellos proyectos a un funcionario del Ministerio de Asuntos Exteriores, al que prometió destituir.
De todos modos, la facilidad con que se han movido en Venezuela los etarras allí acogidos por los acuerdos de 1989 entre Felipe González y Carlos Andrés Pérez, y otros que han podido irse añadiendo, es algo conocido por las Fuerzas de Seguridad española desde hace tiempo.
Siempre se ha insistido, a Chávez y a los gobernantes venezolanos anteriores en la necesidad de ejercer un mayor control sobre sus actividades.No obstante, demostrar la existencia de una conexión con el Gobierno de Caracas sería un salto cualitativo. El juez Eloy Velasco ya ha enviado en auto al Ministerio de Asuntos Exteriores para que éste, a su vez, lo haga llegar a las autoridades venezolanas. Cuando se reciba la respuesta de Caracas, Exteriores se la trasladará al juez.
El ministro de Justicia, Francisco Caamaño, se comprometió a «poner en marcha todos los mecanismos de cooperación jurídica internacional para obtener la información» que el juez necesita.