Traseros limpios es otra de las obsesiones del Comandante Patilla

A los zoquetes que creyeron en los propósitos de enmienda de Hugo Chávez, pues no les dio mucho chance para semejante necedad y este jueves, envalentonado y ordinario apareció de nuevo tal como es, el tropero ambicioso de mandar de manera vitalicia, diciendo lamentar que los diputados de oposición quieran todo o nada respecto a la Habilitante. Porqué muy bien sabemos que el cuento de entregarla el mes de mayo es simplemente porque ese es el lapso que necesitan él y sus jefes castrocomunistas para imponer el “Paquetazo cubano”.

Se despojó ya del costoso traje comprado por miles de euros en alguna tienda de la Place Vendôme, donde este “Revolucionario” de opereta se compra ropa y joyas, porque la pobreza y el hambre es para ese pueblo al que busca aniquilarle la entereza y el coraje y convertirlo en siervo, mientras que él, su familia y su corte acumulan fortunas imposibles de justificar y devastan Venezuela, la tasajean y se la reparten…

Otra vez de verde olivo, con ese modelito que es mezcla del uniforme del tirano cubano y su sudadera roja vuelve a aparecer el Comandante Patilla en cadena de radios y televisoras para insultar soezmente a los parlamentarios opositores que así pretenda ignorarlos, representan la voluntad del 52 % de los electores venezolanos. Grotesco, obeso, ordinario no contiene la ira al constatar que ya de ese Parlamento no salen sólo aplausos, sino que hay voces que lo dejan en evidencia como el tirano que es… Eso lo descuadra, lo enfurece, lo hace saltarse conveniencias y volver a su esencia de tirano bananero, de militarote cuartomundista convencido de que Venezuela es un cuartel y sólo él ordena y una tropa obedece.

El Comandante Patilla queda en evidencia frente al mundo y vuelve a dejar sin argumentos a los que pensaron poderlo vender otra vez como el demócrata conciliador que apareció el pasado sábado hablando de diálogo y de conciliación con los adversarios políticos… Aparece realmente el que es, el tirano, el grotesco gorila militar que no concibe opositores y por tanto los insulta y pretende ignorar sus voces. A los parlamentarios opositores los descalifica por haberse “Atrevido” a contrariarlo y pedir que fuesen derogados los poderes especiales que le otorgó la antigua Asamblea Nacional, cuando ya no tenía legitimidad para hacerlo por estar de salida a finales del pasado 2010. Asegura pues el Comandante Patilla que “no devolverá la Habilitante”, porque devolverla simplemente le significaría torcer sus planes de imponer aquí la copia de la tiranía de los Castro que es su plan y su anhelo más caro.

Como les digo, sin casi poder esconder la ira dice (Lo cito): “Les he tendido la mano para un diálogo. Ofrecí entregarles la Habilitante en mayo, pero ellos quieren todo o nada. Pues vayan a lavarse ese paltó. A los opositores les falta humildad, yo no voy a devolver la Ley Habilitante, están muy equivocados, ahora no les voy a devolver la Ley Habilitante”… Y para los que fuera no entiendan esa soez expresión de mandar a “Lavarse ese Paltó”, pues les cuento que es una de las formas ordinarias y escatológicas de decirle a alguien que se convenza de que no logrará lo que pide y por tanto “Vaya a lavarse el trasero. Y no es la primera vez que manda a lavarse el trasero a alguien… Lo ha hecho con funcionarios de gobiernos extranjeros, con opositores venezolanos… Sólo para refrescarles la memoria, les recuerdo que la tarde del 28 de febrero de 2009, también en cadena de Radio y Televisión Chávez al presidente de los Estados Unidos textualmente le dijo: “Váyase a lavar ese paltó, Señor Obama”…

Obsesión por los traseros limpios parece tener el Comandante Patilla, porque es una de sus órdenes preferidas mandar a sus enemigos o a aquellos que lo contrarían a lavárselo, obsesión que junto con permanecer de manera vitalicia en el Poder no logra esconder… Y por supuesto, el caporal aparece nuevamente desnudo en su bestialidad y comprendemos por qué, más temprano, sus lacayos en la Asamblea Nacional, trataban de cayapear a los parlamentarios de la Oposición Democrática. Allí han mostrado lo que será ese Poder Legislativo donde unos esbirros irrespetarán no sólo a los adversarios, sino al pueblo venezolano todo.

Este pasado jueves pudimos ver la verdad… Volvieron a quitarse las caretas, tanto el Comandante Patilla como sus serviles esbirros. No hay pues ninguna posibilidad para el optimismo y menos para imaginar un giro democrático en ese ñangarato envalentonado. Allí vimos la razón por la cual, este domingo 23 de enero los venezolanos debemos salir a la calle a decirle al tirano ¡Basta! Nosotros aquí, y cientos de manifestantes también diciéndole al Comandante Patilla ¡Basta tirano! desde muchas ciudades en el mundo libre y democrático.