El viernes 30 de septiembre vence el plazo para que todos los vertederos de basura existentes en Venezuela sean, definitivamente, cerrados. Eso incluye el de Cambalache, en Puerto Ordaz, informa el Correo del Caroní.
¿Por qué, alguien así lo dijo? No. ¿Algún capricho? Tampoco. ¿El Presidente de la República dio la orden? Menos.
Y es en ese punto donde reluce la explicación de la ex diputada y representante de Movimiento Ecológico, Pastora Medina.
“Ese vertedero a cielo abierto está prohibido por la Ley de gestión integral de la basura, aprobada en diciembre del año pasado y promulgada en marzo de este año. Esa Ley le da un tiempo definitivo a todos los municipios de Venezuela para que todos los que tengan basureros o vertederos a cielo abierto, sean cerrados el 11 de septiembre”, expuso en rueda de prensa.
A 10 días de la fecha prevista, no hay ningún plan de la Alcaldía Socialista Bolivariana de Caroní para acatar esa norma. Todo apunta a que el vertedero continuará existiendo después de ese día. Y por mucho tiempo más.
Sin apoyo
Con varios informes de los consejos comunales de Cambalache en la mano, relacionados con los problemas de salud que han generado las quemas de basura, Medina denunció que el alcalde de Caroní, José Ramón López, hasta ahora no ha emitido pronunciamientos al respecto, a pesar de que a él también le hicieron llegar esos mismos documentos.
“Pero no se trata sólo de ese ente, pues en esa Ley se establece que al Gobierno nacional le corresponde la gestión de servicios y el manejo de la basura; a la Gobernación, la disposición final de los residuos sólidos y a la Alcaldía, el manejo de la basura. A pesar de esas competencias y los llamados de atención, no se ha hecho nada”, denunció.
Citó la Memoria y Cuenta del Ministerio del Ambiente de este año, que advierte sobre la necesidad de clausurar todos los vertederos existentes en el país, tal y como recomienda la Ley de gestión integral de la basura. El caso de Cambalache también está especificado allí.
¿Qué se está haciendo?
Pastora Medina resaltó que el único ente que maneja el caso de Cambalache es la Asamblea Nacional, a través del diputado por el estado Zulia, Julio Montoya.
“Yo misma informé en la Comisión de Ambiente, y tengo entendido que los diputados de Guayana también lo hicieron. Pero fue el diputado Montoya quien llamó la atención al Ministerio del Ambiente sobre Cambalache.
Nosotros denunciamos lo de Cambalache por dos razones: lo de la basura y la laguna de oxidación que tienen ahí mismo, producto del procesamiento de alúmina de Bauxilum”, especificó.
Ni un pronunciamiento, aseveró Medina, ha habido por parte del Ministerio del Ambiente. Eso es lo que coarta las esperanzas de que el problema sea resuelto. Más bien, este ha crecido, como lo demuestran las cifras: Bolívar ocupa el quinto lugar del total nacional de enfermedades respiratorias.
“A eso hay que añadirle que Caroní ocupa el tercer lugar en cuanto a municipios. Por cada 10 niños que nacen en Guayana, uno tiene problemas serios de autismo y labios leporinos. ¿Por qué vamos a dejar que se muera nuestra población?”, cuestionó.
Que no falte nadie
Desde ya, Pastora Medina está convocando a una concentración en la entrada del vertedero municipal en Cambalache. El objetivo: exigir su cierre definitivo.
“Invocamos al pueblo de Guayana, a las iglesias y a los trabajadores a que el 30 de septiembre no permitamos que ese basurero siga funcionando. La Alcaldía y la Cámara Municipal deben determinar ya cuál es el lugar para eso”, exhortó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario