26/10/11

Once millones de dólares, perdió la nación en un contrato que el Ministerio de Alimentación adjudicó a dedo y que no fue honrado por el beneficiario.

El Ministerio de Alimentación, otorgó sin licitación un contrato de compra de carne por 40 millones de dólares, a una empresa en Paraguay, a través de un ciudadano venezolano llamado Benjamín Rosales quien recibió un adelanto por 11 millones de dólares.

Rosales importó carne de primera pero para venderla en su negocio particular, a través de su empresa ubicada en el CCCT. La idea, era que al venderla y recuperar más del monto que le habían adelantado, importaría entonces la carne que sí entregaría al Ministerio que la distribuiría a su vez a través de CASA.

Pero el plan no le resultó bien a Rosales pues al ingresar la carne a Venezuela fue retenida por el SENIAT porque su empresa no contaba con los permisos necesarios para permitir que la carne saliera de la aduana.

Benjamín Rosales no pudo cumplir con el contrato que le otorgó el Ministerio de Alimentación por lo que huyó a Miami donde se encuentra ahora.

Sin embargo, el socio de Rosales de nacionalidad paraguaya, está detenido en la DIM. La carne tiene más de 4 meses sin salir de aduana y el Ministerio de Alimentación hace esfuerzos inútiles porque no se haga público el guiso de la carne.

Colectivos chavistas denuncian gran desfalco en Ferrominera

Las denuncias sobre hechos de corrupción dentro del Gobierno, ya no se limitan sólo a los periodistas de investigación o sectores de oposición.

El Colectivo Obrero Revolucionario, de reciente creación en Guayana hizo llegar al propio presidente Hugo Chávez la denuncia sobre una presunta estafa que se estaría gestando con la creación de una Empresa Naviera que está a cargo de las operaciones portuarias de las empresas básicas.

En la carta enviada al Presidente, el Colectivo Obrero Revolucionario afirma: La preocupación de los trabajadores es que pretenden “poner zamuro a cuidar carne”, cuando se manejan algunos nombres de personajes que estarían al frente de la mencionada Empresa Naviera y que tienen un pasado muy oscuro vinculado con las enormes cantidades de dinero que ha tenido que desembolsar el Estado venezolano y que ha servido para enriquecer a un sector económico que presuntamente está cerrando el ciclo del negocio, apoderándose absolutamente de las operaciones navieras en las empresas básicas.”

Los denunciantes dejaron muy claro que el objetivo estratégico que se persigue con la creación de la Empresa es sumamente necesario, pero la preocupación es de quienes andan tras la dirección de la misma. Dentro de los responsables de este desangre señalan también a quienes desde la CVG han tenido la responsabilidad de otorgar la permisología, supervisar las operaciones y que hoy pretenden hegemonizar la dirección de la Corporación para entregar la Empresa Naviera en manos de los “zamuros”.

Los representantes del colectivo obrero también señalaron que los trabajadores que integran las nóminas de las contratistas que prestan servicio en los puertos de las diferentes empresas básicas, trabajando a destajo deben ser incorporados a la nueva empresa naviera del Estado, para hacer justicia y erradicar las condiciones de explotación a que han estado sometidos durante tanto tiempo.

A continuación las denuncias específicas que hace el colectivo chavista sobre las irregularidades que se han venido cometiendo en el caso de Ferrominera:

1.-En la época del expresidente de Ferrominera Cesar Bertani, éste conjuntamente con el exgerente general de Comercialización y Ventas Eduardo Batistini, hicieron la negociación para un segundo barco para almacenaje de mineral de hierro y le dieron el nombre de Estación de Transferencia Bocagrande II, con capacidad de carga de 100.000 toneladas. Este barco se adquirió en el 2006, cuando ya tenía 24 años de uso, siendo que la vida útil de un barco es de cerca de 30 años.

El barco costó alrededor de 7 millones de dólares y hubo que adaptarle una transformación que costó 72 millones de dólares, (un mecanismo de autodescarga del material almacenada a los buques de exportación que sobrepasan el calado permitido en el canal de navegación del Río Orinoco).

El barco llegó a Venezuela en el 2008 después que le hicieron la transformación la en China. Un barco de esas mismas características nuevo de paquete, modelo 2012, cuesta alrededor de 50 millones de dólares y por éste, con su tiempo de vida casi expirado, se pagaron casi 80 millones de dólares. (Información extraída de (www.tradewinds.ne).)

Desde que llegó este barco ha presentado toda serie de problemas: De cuatro grúas se quemaron dos, y el barco presenta tres fisuras, todo esto debido a que su vida útil se está agotando. La rata de descarga era de 6000 o 7000 toneladas por hora y a pesar de las adaptaciones que le hicieron sólo descarga 2000 toneladas.

Estos datos pueden ser verificadas tanto en la memoria y cuenta de esta Empresa, como en la página web mencionada.

2.- En el año 2008, en plena crisis estructural del capitalismo, se desplomaron las bolsas de valores y CVG-Ferrominera que vendía material de hierro a diferentes acerías en el mundo sufrió la crisis en consecuencia, pues muchas de esas acerías que trabajaban con cartas de crédito financiadas por la banca transnacional, se cayeron y no hubo venta de mineral de hierro para exportación, hasta por cinco meses.

En mayo del 2008, se designa una Comisión encabezada por el exgerente de Comercialización y Ventas Jorge Cañas a quien mandan a China a captar clientes, lo cual hizo pero en vez de llevarlos a CVG-Ferrominera se los llevó a su compadre Tyrone Serrao, de la empresa CME-Commodities & Minerals Enterprise LTD, intermediaria creada para la comercialización de hierro.

CVG-Ferrominera le vendía mineral exclusivamente a CME que revendía el mismo mineral a los chinos. Esto sucedió hasta el año 2010. En la actualidad siguen en el negocio pero no con exclusividad, pues ahora se está alternando con otros clientes.

Adicional a esto, llegó un momento en que el señor Tyrone Serrao alquilaba los propios barcos para colocar la carga en los puertos, cuando así lo requerían los clientes internacionales, realquilándolos a CVG-Ferrominera. De esta manera alquilaba a $ 15.000 dólares y le subarrendaba a CVG-Ferrominera en $ 50.000 dólares. El precio se contabiliza por día, lo cual originó que la Empresa pagara más por el transporte del material que lo que se cobra por la venta del material a los clientes internacionales.

Por otra parte los barcos de acarreo de CVG-Ferrominera tuvieron dificultades y fueron paralizados por diferentes razones, entre ellas algunas fisuras, ¿eso es casualidad o fue provocado?

Se presentó la dificultad de no poder llevar el mineral de hierro a la estación de transferencia y esta empresa CME en combinación con los responsables de CVG-Ferrominera, empezaron a traer mas barcos alquilados, los fondeaban y ocasionaban mayor carga económica a Ferrominera y por ende al Estado venezolano, con mayor pérdida de recursos y el compromiso de que a cambio de esa deuda la entregaran material de hierro.

3.- Cuando en el año 1988 se creó la necesidad de vender mineral de hierro a mayores volúmenes en barcos más grandes, Ferrominera tuvo que adquirir sus propios barcos y por motivos legales no los administró directamente por lo que contrató una operadora. La primera fue Orinoco de Navegación, luego pasó a otra empresa de nombre Transferven, después vino Bulk Guayana y luego a partir abril del 2004, pasó a manos de Cargoport, cuyos dueños son José Luis Fassio y su socio Juan José Bolinaga, (abogado asesor del METRO de CARACAS, presuntamente vinculado con exdirigentes sindicales de esa empresa) y se encargaron de la operación durante 7 años, siendo la peor empresa que pasó por allí, ya que no se hizo mantenimiento a los barcos, y lo que se produjo fue vandalismo.

Un año antes de culminar el contrato de Cargoport, alegando el mal manejo, se le entregó la operación sin licitación al Consorcio SMT Silva, cuyo dueño es Clemente Silva. Este operador también está vinculado con Jorge Cañas, Tyrone Serrao, y por ende presuntamente también con el Presidente de Ferrominera.

Por su parte, Juan José Bolinaga, contando con el apoyo de los tribunales, demandó al Estado venezolano por 26 millones de dólares, y retuvo al Barco Río Caroní en Curazao con la demanda internacional para obligar al pago de la demanda. Estando en Curazao sabotearon el barco el 04 de Enero del 2011 quemándole la sala de máquinas. Ahora pretenden venderlo como chatarra y quien tiene la primera opción es Consorcio SMT Silva…

La justificación para entregar el contrato sin licitación al Consorcio SMT fue la de adoptar un socio técnico que garantizara la operatividad de los barcos.

De esta manera cierran el círculo de corrupción, se apoderan del transporte fluvial y tienen todo controlado desde el punto de vista del negocio, la captación del 90% de las ventas de mineral de hierro, su fletamento y sobreprecio en los barcos, y tienen la administración de la operadora de los barcos de CVG Ferrominera que es la encargada de transferir a la empresa CME.

En el año 2010 se pagó un total de 158 millones de dólares en demoras de barcos a CME.

4.-Cuando CVG Ferrominera vende el mineral, no recibe ningún pago hasta que la carga llega a China, en todos los casos del negocio relacionado con Tyrone Serrao. En el 2009 y 2010 llegó a acumularse una cantidad de 1.500.000 toneladas de mineral de hierro vendida a SME de las cuales había de 150 a 200.000 de briquetas. El empresario tenía un año sin pagarle el mineral que se había llevado, porque como es venezolano quería pagar en bolívares, situación que presuntamente aceptó el Presidente de Ferrominera elaborando un documento en la Gerencia de Finanzas, que no fue avalado por la funcionaria, porque eso constituye un ilícito cambiario.

La planta de briquetas de Puerto Ordaz, que pertenece a Ferrominera está en el piso por falta de mantenimiento, y todo el dinero que producía se lo llevaba la demora de barcos. La plata estuvo parada por 8 meses.

En el 2008 la tonelada de hierro estaba a 30 dólares. Debido a la crisis, bajó a 17 dólares y las briqueteras a nivel mundial cerraron su operatividad. La administración de la briquetera OPCCO de Ferrominera era operada por empresas japonesas y mexicanas que funcionaron hasta el año 2002.

El hierro fue subiendo el precio y ahora está a 104 dólares para los clientes de afuera y a Tyrone Serrao se la venden al precio preferencial de 79. Los precios de las briquetas han aumentado de 300 dólares a 700, y también se les entregan a Tyrone Serrao el precio preferencial, incluyendo las que se compran a las dos empresas briqueteras nacionalizadas Venprecar y Comsigua.

A Tyrone Serrao disfrazado de empresa china, presuntamente también le entregaron una concesión de la Mina Cerro Bolívar y todas las máquinas, los montacargas, grúas y todos los equipos están alquilados a Caterpillar, cuyo concesionario precisamente también es Tyrone Serrao.

Ferrominera anteriormente producía 22 mil toneladas por año y ahora está produciendo apenas 13 mil toneladas.

Finalmente, los integrantes del Colectivo Obrero Revolucionario señalaron que para Venezuela genera mayor rentabilidad dirigir todo el mineral de hierro a Sidor para que sea transformado en acero líquido y darle valor agregado creando mas briqueteras, que generan mayor cantidad de empleo y productividad en el país, y propusieron construir vías férreas para eliminar el vicio de los barcos grandes al dejar de ser exportadores de materia prima.

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