Cuando dejará de proteger el régimen Cubano-Madurista a Narcogenerales?

No es ningún secreto que el régimen chavista siempre ha tenido en sus filas, y hasta lo mas alto de la cúpula, a individuos con conexiones directas al narcomenudeo. Los ejemplos más notorios son el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, el ex comandante de las Fuerzas Armadas, Henry Rangel Silva, el jefe de la Región Estratégica de Defensa Integral Guayana, Cliver Alcalá Cordones y el ministro del Interior, Hugo Carvajal.

En mi reciente testimonio ante el Subcomité encargado de asuntos de Terrorismo, Anti-Proliferación y Comercio del Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, tuve la oportunidad de exponer nueva información acerca de las actividades del narcotráfico en Venezuela y sobre nuevos hallazgos de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) que involucran a estos individuos y que expanden el conocimiento previo que se tenia sobre su involucramiento con el trafico de cocaína. Estos miembros del gobierno Cubano-Madurista son responsables del transporte de toneladas de droga ilícita a Centroamérica, El Caribe, Mexico, Estados Unidos y el oeste de África.

Estimaciones conservadoras indican que el tráfico de drogas de Venezuela a otros países desde que Chávez tomó el poder se ha duplicado.

Mis fuentes me informan que representantes del Cartel de Sinaloa operan en corredores de cocaína claves en Venezuela con el apoyo de autoridades venezolanas.

Pocos saben que el narcotraficante más poderoso del mundo, Joaquín “Chapo” Guzmán, manejo su negocio desde Venezuela durante casi todo el 2010 desde un suburbio de Caracas y en la Isla de Margarita hasta principios del 2011 bajo la protección del personal de seguridad del régimen chavista.

La cúpula chavista en conjunto con organizaciones criminales de todo el hemisferio han establecido un paraíso de la ilegalidad en Venezuela desde donde se puede operar con impunidad en el trasiego de drogas, armas y personas. Este régimen ha sido responsable por el incremento exponencial de violencia y crimen en toda la región.

Con nuevas elecciones en puerta para Venezuela, países como Estados Unidos, México, Colombia y Brasil tienen la responsabilidad de demandar mayor transparencia por parte del gobierno venezolano y de apresar a todos aquellos que promueven el crimen y la violencia que aflige a la región.