El final de este patético gobierno y la profecía del calendario maya tienen la misma fecha: diciembre del 2012. El calendario maya se refiere al final de los tiempos. Espero que sean los tiempos de Chávez. Y el final de este patético gobierno se refiere a su inevitable derrota electoral. Por lo tanto, hasta hoy restan 769 días en la cuenta regresiva.
La profecía maya está guardada en mi baúl de los recuerdos pero la derrota electoral de Chávez del 2012 está escrita en mi agenda de HECHOS INFALIBLES, con letras mayúsculas, por 2 razones fundamentales: la caída libre y permanente de su popularidad, y la nueva Asamblea Nacional que entrará en acción a partir del 5 de enero del 2011.
La caída libre de la popularidad de Chávez no solo es visible y palpable en los resultados de las elecciones del 26 de septiembre, con la mayoría de votos a favor de la oposición, sino en la indignación actual de todos los trabajadores venezolanos, incluyendo chavistas. Todos están como plancha e´ chino con la pérdida de innumerables puestos de trabajo y de la productividad, como consecuencia de las expropiaciones. Sería cuestión de preguntarles sobre Agroisleña, Owens Illinois, fincas en plena producción, intervención de bancos, complejos habitacionales, y demás patadas, para entender la razón por la cual no quieren ver a Chávez ni en pintura. Pero, todavía falta ver la cara que van a poner con lo que se les viene encima. Como consecuencia de la raspada de olla de Pdvsa, y para poder soportar el nuevo presupuesto del 2011, el Gobierno ha planificado buscar ingresos, no en la producción petrolera que está en la ruina, sino en el Seniat, con mayor imposición de impuestos. Y, ¿a qué empresas le cobrarán esos impuestos? Será a las ventas de perroscalientes, a los Kioscos de chucherías, revistas y periódicos, o a los tarantines de los buhoneros, porque las grandes empresas de este país ya han sido expropiadas, pertenecen ahora al Estado y se encuentran en la bancarrota. Francamente: aquí es donde cualquier cerebro venezolano de mediana inteligencia se pregunta: ¿y dónde está el billón de dólares que le ha ingresado a este Gobierno? ¿Lo gastaría en las nuevas autopistas y carreteras del país? ¿En mejorar el servicio eléctrico nacional? ¿O en los hospitales? ¿En construir viviendas? ¿En combatir la inseguridad? ¿O en la pudrición de alimentos de Pdval? ¿O en mermelada de plátano para Rusia, regalitos para Cuba, Nicaragua, Argentina, Bolivia, Ecuador y cien más? O sea: qué Gobierno tan remalo.
La segunda razón de la inminente derrota electoral de Chávez en el 2012 es la nueva Asamblea Nacional que asume el 5 de enero. Será el rompeolas de su cínica violación de la Constitución Nacional. La contraloría de su despilfarro. La pesadilla de sus sueños perversos de expansión y radicalización del fracasado sistema castrocomunista. La revelación del misterio oculto de sus convenios internacionales que están hipotecando al país. Y la pérdida del control absoluto de los poderes del Estado. Pero Chávez también lo sabe. Y, por esa razón, está consolidando la base legal del parlamento comunal y su desmadre comunista, con la aprobación apresurada de leyes maula en estos 30 días que le quedan a la moribunda Asamblea Nacional chavista. Falta ver si los venezolanos de mediana inteligencia también van a tolerar ese nuevo abuso de poder de este patético Gobierno. Sería el colmo
Nos vemos en el 2012.
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